Mamapacha, ya que así se la denomina en el Perú. Mama: madre y
Pacha:
universo, mundo, tiempo o lugar
(recordemos que en quechua Tierra es
ashpa o allpa)
por lo tanto Pachamama sería la madre de la tierra, madre del lugar
o madre del cerro.
La deformación de Mamapacha se debió a la interpretación local
del quechua
(lengua no originaria de nuestras tierras)
por parte del cacano, el lule o el tonocoté;
esta celebración se hace para agradecer, pedir y bendecir los
frutos que nos ofrenda la Madre Tierra Es poder de la Pachamama hacer crecer
las cosechas, multiplicar el ganado, cuidar los animales
silvestres y bendecir a los artesanos.
Los festejos en su honor son los 1º de
agosto
En las sendas de los cerros se
encuentran cada tanto amontonamientos de piedra llamados
apachetas que tienen un doble sentido: guiar a los viajeros y ser un altar en
el cual se dejan ofrendas de diversas características: hojas de coca, vino,
chicha, aloja, comida, cigarrillos, yerba, etc.
Estas apachetas son bien recibidas por la Madre Pacha que
ayudará a los peregrinos a
llegar a destino sin inconvenientes.
Cada vez que se va a sembrar, cosechar, marcar la
hacienda o correr el ganado, se cava un hoyo y en él se
depositarán las ofrendas… es lo que se llama corpachar o dar de comer a la
tierra.
La Pachamama es un diosa femenina, que produce, que bendice,
que engendra.
Su morada está en las entrañas
mismas de la tierra.
El Sahumerio: En agosto, la ceremonia incluye la limpieza
total de las casas, por la mañana, a primera hora, los habitantes de este
fantástico
pueblo, juntan la basura de todas las esquinas, la colocan en
una pala conbrazas y le agregan chacha y pupusa
(plantas de la zona) y con esto sahuman todas las
casas, las cosas y también a los integrantes de las familias.
A lo lejos se puede ver el humo que sale de los
caseríos formando un paisaje único.
De esta manera se le pide perdón a la madre tierra de rodillas
y agradeciendo y
rezando en conjunto.
El Ritual:
El ritual consiste en preparar un
saumerio con alcohol en un "suyo de llama" sumarle
comidas criollas y
recipientes con bebidas fuertes.
Todo esto se deposita en un pozo excavado
previamente en la tierra y luego se tapa con una piedra blanca
(apacheta) para
identificar el lugar para el próximo año.
La ceremonia incluye la ingesta de
mate con alcohol y la colacación de "Llojke"
(también llamado Yoki, amuleto
realizado de dos hebras de hilo de color blanco y negro
1) La comunidad, familia o grupo se reúne
en círculo para expresar esta
igualdad y hermandad ante la Pachamama.
Si una hace el ritual sola es
bueno marcar el círculo con
una rama o piedras.
El centro del círculo representa a la Diosa.
De esta forma se expresa esa igualdad
y hermandad; todos están a la misma distancia de ese centro
sagrado y pueden acceder a él.
2) En el centro se
abre un pozo con mucho respeto pidiéndole permiso a la Diosa.
Abrir este pozo es abrir su seno, su útero fértil y creador.
También se canta y se baila antes de la ofrenda para llamar y
despertar a la Diosa danzando descalzos para captar las energías regeneradoras
de la Pachamama.
3) Luego se
ofrenda bebida y comida a Pachamama en el pozo.
Se le da de comer y beber a la Diosa
que ha despertado de su sueño invernal.
También se le ofrendan semillas, hojas de coca, y cada persona
o comunidad pude
honrarla con algo particular.
Sahumando las ofrendas y el pozo con carbones encendidos y
hierbas o aceites
esenciales se hacen invocaciones y pedidos diciendo:
"Cusiyá, Pachamama,
cusiyá... (Ayúdanos,
Pachamama, ayúdanos)
Tú que nos das todo, ahora que has bebido y comido, a Ti te
pido
salud y fecundidad, entierra a los malos espíritus y que
florezcan de tus semillas la bondad y la
vida".
4) Al finalizar
se cubre el pozo con una piedra plana o con la tierra y encima
se señala el lugar
con piedras redondas formando
un montículo de veneración.
El ritual concluye con más bailes y danzas celebrando el
retorno de Pachamama.
La comunidad también comparte la comida y
bebida que se ha ofrendado a la Diosa.